Se trata de un edificio de 6 plantas en el que 30 artistas de muchas nacionalidades desarrollan su creatividad y muestran sus trabajos al público de manera gratuita. El visitante puede entrar en el edificio y pasearse por todas las plantas, conociendo a los artistas y descubriendo las sorpresas que depara cada rincón de este peculiar lugar.
El edificio es impresionante por la cantidad de ideas que hay plasmadas en su interior, pero lo que más me llamó la atención fue el ambiente acogedor de ese lugar. Los artistas daban la bienvenida a todas las visitas y estaban abiertos a explicar sus obras y contestar a cualquier pregunta.
Desde luego, es una visita imprescindible si visitáis París.
Para saber más acerca de la historia del lugar y las exposiciones, performances y conciertos que tienen luegar allí, os dejo el enlace a su página web:
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